Una mirada sobre la elección P.A.S.O. 2023

Un dato no menor, es que en la generalidad las Listas en pugna son encabezadas por hombres, que si indagamos un poco más respecto de la participación por género, la mujer ha quedado como relegada en el armado de las fórmulas presidenciales.

Notas en esta entrada:
- Una mirada sobre la elección P.A.S.O. 2023
- La Argentina ganadora
- PASO: el 14 de agosto no habrá clases matutinas en colegios afectados

 

La elección Primaria Abierta Simultánea y Obligatoria carente de propuestas concretas, servirá para resolver en elección interna qué candidatos y candidatas a presidente y vice presidente de cada agrupación política que por Ley obtengan el 1,5 % de los votos válidamente emitidos en todo el territorio nacional, les permita y así logren competir en la elección general.

El guarismo eleccionario del próximo domingo es una incógnita, y además se prevé un importante incremento en el porcentaje de abstenciones, serán los sucesos económicos y políticos que atraviesan a la Argentina que influya en el electorado para decidir no presentarse a votar, el recuento de votos el domingo tiene un final abierto.

Es difícil imaginar una elección polarizada entre los Frentes mayoritarios, una vez que se determinaron los candidatos se conjeturó sobre una elección de tercios o de cuartos, cada agrupación política cuenta desde el arranque con un voto cautivo. Pero han aparecido a la escena política otras corrientes de hacer y de pensamiento ideológico.

Quienes hoy presentan candidaturas están al corriente que sus imágenes son más negativas que positivas y esto se traducirá en mayor cantidad de abstenciones a la hora de sufragar, saben y no podrán decir pecar de ignorancia, los traspiés y los errores cometidos se pagarán en las urnas, por el desapego a cumplir fielmente con los mandatos conferidos, quienes gobiernan y legislan en la actualidad han sido ungidos con el voto popular pero fracasaron, tanto oficialismo como oposición cada cual desde el 2015 a la fecha solo trató de capitalizar el error del otro y no de ofrecer soluciones.

Hablemos del endeudamiento interior y exterior, de inflación, de pobreza, hablemos de pandemia también que podría haber sido tomada la ingrata situación mundial como un factor de unidad nacional, pero no sucedió.

La anterior elección 2019
En la elección 2019 recordemos que el porcentaje de participación en el acto eleccionario fue del 76,41 % del electorado, observemos el proceder cívico del domingo en la anterior P.A.S.O., los votos en blanco y anulados reunieron el 4,69 %, un porcentaje nada despreciable para quién anhela obtener una base de votos que le permita participar de la elección general.
Pero bien, podríamos preguntarnos cuál podría ser el resultado en definitiva para que la elección se traduzca en una elección de tercios, de cuartos o de quintos y que no se polarice.

¿En cuánto tendría que decaer el caudal de votos de los Partidos mayoritarios?, recordemos y no es menor el dato de los 12.205.938 de votos (47,79 %) que obtuvo en 2019 la formula Alberto Fernández - Cristina Fernández de Kirchner (Frente de Todos). Ahora encabezando por la coalición Unión por la Patria el propio ministro de Economía Sergio Massa y preguntarse además que piso de votos conseguirá el oponente Juan Grabois por el Frente Patria Grande y que reste votos a la formula Massa - Rossi.

En este sentido, aparte de, tantear qué comportamiento tendrían los 2.081.315 de votos (8,15%) que lograba obtener Consenso Federal, liderado por el economista Roberto Lavagna, sin olvidar que algún miembro de ese espacio político integra el equipo económico del gobierno Nacional.   

Por el lado de Juntos por el Cambio en la interna que juegan Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, la cuestión de no está de parabién. Algún quebranto de palabra de última hora y otras cuestiones de tipo ideológico y de mirada política los diferencian sustancialmente, esta situación hará decaer el caudal de votos que la fórmula Mauricio Macri - Miguel Pichetto obtuvieron en 2019, un total no despreciable de 8.121.689 (31,80 %) de sufragios. Que en la elección general el ex presidente Macri logró remontar, pero no le alcanzó. Por votos obtenidos por J x C el domingo, pensemos en un divide dos. Además, repensar sobre los votos obtenidos en 2019 por Juan José Gómez Centurión y José Luis Espert con una sumatoria de 1.220.755 votos, estos se sumarán a la elección interna de Juntos por el Cambio, no se sabrá hasta el domingo, porque, además, en política nada es lineal.

¿2023: Elección de tercios, cuartos, o quintos?
Y en esta elección surgen a la arena política nacional nuevas alternativas con intención de federalizar sus espacios políticos. Por un lado, Javier Milei por Libertad Avanza y Juan Schiaretti por la Lista Hacemos por Nuestro País y la pregunta para que todo se traduzca en elección de tercios, de cuartos o de quintos, es con qué piso de votos para presidente y vicepresidente arrancarán en esta P.A.S.O., tanto el espacio Libertario o el que encabeza el actual gobernador de la provincia de Córdoba.

También las Listas o Frentes de Izquierda tendrán su P.A.S.O., Myriam Bregman, Gabriel Solano, Manuela Castañeira, ¿lograrán superar ellos el desempeño electivo de 2019 en el que alcanzaron totalizar 902.608 votos Nicolás del Caño y Manuela Castañeira?.

El domingo, una mayoría nos vamos a expresar en las urnas.

Un dato no menor, es que en la generalidad las Listas en pugna son encabezadas por hombres, que si indagamos un poco más respecto de la participación por género, la mujer ha quedado como relegada en el armado de las fórmulas presidenciales, se podría decir casi sin tenerse en cuenta que hay, con escasa diferencia, una paridad en la cantidad de electores hombres y de mujeres, donde las mujeres rozan el 51 % del electorado.

Idealicemos que los resultados del domingo, con premios o castigos, lo que sea, lo que fuere, que a partir de ahí florezca un llamado a una profunda reflexión de la dirigencia política, que una vez finalizadas las contiendas electorales se logre consensuar y se establezca una hoja de ruta para que, entre todos con poder, determinar políticas de Estado en beneficio de la comunidad toda.

Colaboración: Tomás Amela

La Argentina ganadora

“En cada período eleccionario el sistema político de representación argentino es auditado por la ciudadanía, a través del ejercicio democrático del voto. Con mayores o menores expectativas ideológicas, con militancia o sin ella, con críticas o desinterés, con esperanzas y broncas, argentinos y argentinas participamos del proceso cívico que consolida nuestra libertad individual y hace efectiva la soberanía popular.

A cuarenta años de la recuperación definitiva de la democracia en la Argentina, luego de haber padecido los períodos más oscuros de nuestra historia bajo el yugo de diversas dictaduras, la importancia de ir a votar se vuelve una conquista -innegociable e imprescindible- para garantizar el desarrollo humano de todos y con todos.

El análisis político me permite esgrimir dos hechos que han marcado las últimas décadas en el ejercicio de la cosa pública a nivel internacional, en detrimento directo de la credibilidad de sus gestores y perjuicio consecuente sobre millones de representados, en un sinfín de realidades que limitan el crecimiento digno de la condición humana.

El uso constante de la mentira y la simulación como herramientas reiteradas desde la dirigencia pública, para conseguir -por ejemplo- el favor popular de los votantes, sin mediar consecuencias nefastas posteriores para ellos. “Si les decía lo que iba a hacer, no me hubieran votado”, dijo el ex presidente, como triste muestra para avalar el presente argumento. La industria de la mentira se fue instalando como un poderoso virus global en todos los ámbitos posibles de inserción, incentivada y hasta festejada por la cultura liberal-capitalista imperante, artífice de la más procaz artificialidad, del “parecer”, antes del “ser”.

Allí donde no interesa la política como servicio público, donde se anulan los debates de ideas y vacían de contenido las expresiones ideológicas; allí donde la política es reducida a una simple “escenificación del márquetin”, donde el ciudadano es un mero espectador acrítico, engañado, resignado, harto, sin poder real de cambio y condenado a soportar lo que venga.

El segundo hecho pernicioso, es la injusticia. Sabedores todos que vivimos en un mundo desigual pero particularmente injusto, la falta de justicia se instala socialmente desde el proceder mismo de las instituciones estatales encargadas de aplicarla. La sensación popular es que existe una justicia para ricos y otra para pobres, creencia ésta que se vuelve palpable cuando los poderosos infringen las normas sin mayores obstáculos, mientras los menos favorecidos las acatan con todas sus consecuencias. La grieta entre liberados y encarcelados, está marcada por la disponibilidad o no de una cuenta bancaria importante. Efectivo mata justicia.

Este lamentable escenario -que es internacional-, pone en evidencia la enorme crisis ética y moral que atraviesa la humanidad, donde las mentiras y las injusticias son los elementos centrales de esa descomposición social, aparentemente irreversible. Por ello sostengo que las crisis no son económicas o políticas, son morales, humanas, disfrazadas de lo otro, de lo evidente pero convenientemente soslayado desde la mayoría de los medios masivos de comunicación (no todos, hay que ser justos!).

La amoralidad se despliega como un abanico seductor, posible, la llave del éxito social a como dé lugar, donde la apariencia material te incluye o excluye de ese mundo para pocos, exclusivo, “premium”, mentiroso e injusto. En ese mundo virtual, la esencia y el contenido de las personas no interesan, no son convenientes a una estructura armada para la ficción y el lucro interminables.

Y así por ejemplo, millones de jóvenes pierden sus vidas queriendo alcanzar esa ficción de manera rápida, sin esfuerzos, sin moral; siendo parte de ese mundo para pocos, obscenamente rico e ilegal, mientras millones de seres padecen necesidades básicas insatisfechas, producto del egoísmo y la mezquindad moral de esos pocos muy poderosos.

Por todo ello, la Argentina ganadora se manifiesta cuando en cada elección democrática, renueva la posibilidad de aportar con responsabilidad cívica su granito de arena en el combate diario contra la injusticia y la mentira, eligiendo representantes que se ajusten a ese deseo, a esa realidad posible de concretarse, consecuencia de un cambio moral urgente. Todos y todas podemos ser artífices de ese destino común, sin grietas absurdas y en busca del bienestar general.

Gane quien gane, el espíritu de unidad nacional debe imponerse sobre los egos y ambiciones personales. El honor de ejercer la representación popular debe manifestarse con humildad, capacidad de dialogo, responsabilidad profesional, compromiso, coraje, honestidad, creatividad y ejemplo moral, solo de esa manera gana la Argentina. Cuando fuimos indiferentes, cuando miramos para otro lado, nos fue muy mal, perdimos todos…

Hay muchos problemas por resolver, mucho dolor por mitigar. Vayamos a votar y luego aceptemos los resultados, sin dejar de controlar constructivamente el ejercicio del poder, acompañando con sabiduría y honestidad el desarrollo de los acontecimientos públicos que hacen al quehacer nacional, sin mezquindades, con verdad y justicia”.

Colaboración: Prof. Silvio J. Arias

PASO: el 14 de agosto no habrá clases matutinas en colegios afectados

La información fue enviada vía nota a las instituciones educativas a través de las Direcciones de Nivel y Modalidad.

El Ministerio de Educación provincial comunicó la suspensión de actividades durante el turno mañana el primer día hábil siguiente a los comicios del 13 de agosto próximo en aquellos establecimientos educativos afectados a los mismos.
Por tal motivo y a efectos de garantizar las tareas de higiene, especificaron que solo permanecerán en el edificio los directivos y el personal de limpieza.